.Tú.

¿Estás ahí? Contigo veo luces. Iluminan mis vacios y ahuyentan mis dudas. Sé que no estás para mí y tiene que ser la aguja del reloj la que dicte lo que sucederá. Necesito vivir esto, porque sé que nuevamente me acerco a sensaciones que ya hace un par de años había dejado de vivir. Increíblemente necesito estar en aquí sin preguntarme qué vendrá. Cada mirada contiene una textura distinta. Tal vez no seas capaz de verlo. Lamentablemente lo percibo. Pero detrás de este límite entre nuestras miradas, hay algo que no necesita ser catalogado, ni tiene que condicionarse por lo que nos rodea. Simplemente es y está latente dentro de mí. Tal vez es un sueño o una silueta que llega a mis costas inesperadamente. Hay demasiadas preguntas, dudas e inconscientes afirmaciones que no necesito responder. Quiero ahogare en esta paz, sin pensar en consecuencias. No pretendo sembrar confusiones, ni preguntarme que viene. Sólo me quiero amarrar a esta sensación que comienza desde que me acerco a ti. Dime que estás ahí nuevamente y no necesitaré nada más. Pero ¿Estás ahí?